"Un viejo estanque;
se zambulle una rana,
ruido de agua."
--Matsuo Basho
continuación
V
Otro elemento a tener en cuenta a la hora de escribir un haiku, es la regla que desalienta el uso de la metáfora, de las figuras de la retórica y del pronombre personal. Posiblemente esto se deba, a que en el haiku antiguo, la personalidad, el "ego" del poeta, se esfuma para dar paso a una completa absorción con un evento de la naturaleza. Y que el haiku se refiere a "lo que es" y no a un elemento interpretativo introducido por el poeta, como sería el caso de la metáfora al estilo occidental o de otros artificios retóricos. Una posible explicación para comprender el alcance de esta regla, es tener en cuenta, que el haiku japonés nace en un entorno fuertemente influído por el budismo, donde la realidad es algo que no es susceptible de atributo o comparación alguna. Es lo que es. Esidad, como dicen los budistas. Pues el budismo hace más hincapié en la contemplación que en el pensamiento, en la captación de lo que es, sin la distorsión que éste pueda introducir. Y a partir de allí, se puede extraer lo que llamabamos una lección sin palabras, de lo que está más allá de la mente con sus distorsiones, ilusiones y percepciones erróneas. Es de destacar la decisiva influencia del Zen en los haijin estadounidenses. Esto se debe a la difusión del mismo fundamentalmente por la influencia de la obra de Daisetz Suzuki, Alan Watts, Tomas Cleary y muchos otros. Es interesantísmo destacar que Octavio Paz,señala que a partir del periodo Muromachi (1333-16000)la cultura japonesa "se impregna de Zen". Paz enfatiza la importancia de la influencia del Zen en la poesía y el estilo de vida de Basho. En su artículo "Tres momentos de la literatura japonesa" Paz afirma: Haiku is "satori". También llama la atención al hecho de que Basho era discípulo de un monje Zen llamado Buccho. Este modo de considerar al haiku ha adquirido mucha popularidad entre los haijin occidentales, en lo que a mi entender es un cierto modo de reacción a la literatura occidental en sus excesos respeto al uso de la metáfora, el símil, la analogía, así como a el "ego" del poeta que ocupa muchas veces, el eje de la poesía. De todos modos la influencia del budismo en el haiku es objeto de debate, pero no hay duda que ha influido no sólo en Basho, Buson, Issa y Shiki sino también en el haiku occidental, aunque en este caso en forma al menos indirecta y tangencial.
En Occidente, la exclusión del uso de la metáfora y el pronombre personal es muy respetada por gran cantidad de haijin, hasta el punto de que se considera que el uso de las mismas, descalifica a una poesía como haiku. No puedo encontrar un ejemplo más perfecto que el de un haiku de Yosha Buson:
"ante el crisantemo blanco las tijeras dudan un momento".
Aquí queda desplazada sobre las tijeras un sentimiento del poeta, pero dada la maravillosa maestría técnica de Buson, ni siquiera es percibido como un sentimiento proveniente de persona, de "ego" alguno. Pero es de hacer notar que Serge Tome, luego de un profundo análisis ha comprobado que en la actualidad en el Japón, el uso del pronombre personal Yo en los haiku, es mucho más elevado que en el pasado y mucho mayor que en el de los haiku contemporáneos en Occidente. Tome afirma que hemos creado una imagen de la cultura japonesa (en este caso el haiku) que luego es proyectada sobre la misma y que por ende, no es la verdadera esencia de lo japonés.
VI
Otra razón que limita el uso de la metáfora como el de la analogía, es que, como veremos más adelante, el haiku en su misma esencia es inacabado, dejando a la imaginación del lector establecer nexos entre los elementos de la escena o evento que describe. La metáfora es de algún modo un nexo entre dos elementos y no dejaría espacio para la construcción de un vínculo entre ambos por parte del lector. Si decimos "la luna es una perla", estamos comparando la luna por una parte con una perla por otro. El vínculo entre ambas lo representa algo en común: el blanco. De este modo presentamos al lector una escena totalmente resuelta, sin lugar para que el lector recree un sentido. Esta regla, es justo decirlo, muchas veces no es seguida aún por los grandes maestros del haiku japonés, pues ocasionalmente utilizan la metáfora y la alusión a sí mismos en forma sutil y natural, de tal modo que quedan absorbidos por el poema en sí. En la actualidad, como hemos visto, el haiku se ha diversificado de tal modo, que cada una de las escuelas tiene sus propias características y reglas que distan mucho de la antigua y tradicional, tanto en Occidente como en Japón. Es así que el uso de la metáfora y la analogía es considerado perfectamente válido por muchos, como es el caso de uno de sus pioneros: el poeta japonés Kakio Tomizawa (1902-1962), quien comenzó a utilizar la metáfora, la analogía y la abstracción en sus haiku, influido por la poesía occidental, en particular por los simbolistas. Influenciados por él, los poetas jóvenes iniciaron el movimiento "Shinko Haiku" (nuevo y joven haiku), y a la vez rechazaron el uso del kigo.(4) En cuanto al uso del pronombre personal, es decir, marcar la presencia del poeta en el haiku, o bien de otros en el mismo, si bien la regla general, es eludirlo, tampoco supone una prohibición absoluta. En este sentido, la referencia en primera persona se utiliza, siempre y cuando el poeta esté incluido en el evento que es tema del haiku como parte de él y no como un observador que divide la escena en un adentro y afuera. Muchos haiku considerados paradigmas del género, incluyen al poeta o hacen referencia al segundo y tercer pronombre personal, pero siempre dentro de un esfumado cuidadoso que no centra en el ser humano la escena, sino que lo incluye como una parte de la misma.
VII
El haiku es en su núcleo último una escena y ésta una combinación de imágenes. Como tal se puede volver muy compleja según como se elabore la relación entre las mismas. El tan conocido haiku de Basho:
"Un viejo estanque;
se zambulle una rana,
ruido de agua"
presenta una combinación de dos elementos y un tercero como efecto de la interconexión de ellos en el presente. Se origina asi una nueva gestalt que resulta de la combinación de varias imágenes para dar lugar a un escena única y sintetizadora. La habilidad del haijin para lograrlo, es lo que, unido a su inspiración y profundidad poética, dará lugar a un haiku del más alto logro en cuanto a recortar y expresar un sentido nuevo a hechos aparentemente simples y cotidianos. El haiku de alguna manera es esa cuarta dimensión de la realidad que siempre el ser humano ha buscado en el mundo. Y si el haijin logra plasmarla renueva nuestra conciencia cotidiana que se amplia para dar cabida a otra visión del Universo en el que habitamos. Muchos han insistido en que el verdadero haiku es aquel que produce "satori", es decir el "despertar" de la conciencia búdica. Algo así como un súbito relámpago que ilumina por primera vez aquello que la mente humana ha desatendido, omitido o distorsionado.
Es ésta la tercera publicación del material aportado por Julie para Haiga.
Es parte de un trabajo elaborado por Carlos Fleitas que iremos dando a conocer en su totalidad. Gracias.
Carlos Fleitas es escritor y vive en Uruguay. Escribe haiku en Ingles y en su idioma natal, el Español. Fleitas es Director de la sección en Español, de la organización World Haiku Club, donde es co-moderador del correspondente grupo de discussion y co-editor de la correspondente revista, seccion en Español. Para conocer mejor el escritor, visite su site en: http://www.conectate.com.uy/~carlosfleitas
se zambulle una rana,
ruido de agua."
--Matsuo Basho
continuación
V
Otro elemento a tener en cuenta a la hora de escribir un haiku, es la regla que desalienta el uso de la metáfora, de las figuras de la retórica y del pronombre personal. Posiblemente esto se deba, a que en el haiku antiguo, la personalidad, el "ego" del poeta, se esfuma para dar paso a una completa absorción con un evento de la naturaleza. Y que el haiku se refiere a "lo que es" y no a un elemento interpretativo introducido por el poeta, como sería el caso de la metáfora al estilo occidental o de otros artificios retóricos. Una posible explicación para comprender el alcance de esta regla, es tener en cuenta, que el haiku japonés nace en un entorno fuertemente influído por el budismo, donde la realidad es algo que no es susceptible de atributo o comparación alguna. Es lo que es. Esidad, como dicen los budistas. Pues el budismo hace más hincapié en la contemplación que en el pensamiento, en la captación de lo que es, sin la distorsión que éste pueda introducir. Y a partir de allí, se puede extraer lo que llamabamos una lección sin palabras, de lo que está más allá de la mente con sus distorsiones, ilusiones y percepciones erróneas. Es de destacar la decisiva influencia del Zen en los haijin estadounidenses. Esto se debe a la difusión del mismo fundamentalmente por la influencia de la obra de Daisetz Suzuki, Alan Watts, Tomas Cleary y muchos otros. Es interesantísmo destacar que Octavio Paz,señala que a partir del periodo Muromachi (1333-16000)la cultura japonesa "se impregna de Zen". Paz enfatiza la importancia de la influencia del Zen en la poesía y el estilo de vida de Basho. En su artículo "Tres momentos de la literatura japonesa" Paz afirma: Haiku is "satori". También llama la atención al hecho de que Basho era discípulo de un monje Zen llamado Buccho. Este modo de considerar al haiku ha adquirido mucha popularidad entre los haijin occidentales, en lo que a mi entender es un cierto modo de reacción a la literatura occidental en sus excesos respeto al uso de la metáfora, el símil, la analogía, así como a el "ego" del poeta que ocupa muchas veces, el eje de la poesía. De todos modos la influencia del budismo en el haiku es objeto de debate, pero no hay duda que ha influido no sólo en Basho, Buson, Issa y Shiki sino también en el haiku occidental, aunque en este caso en forma al menos indirecta y tangencial.
En Occidente, la exclusión del uso de la metáfora y el pronombre personal es muy respetada por gran cantidad de haijin, hasta el punto de que se considera que el uso de las mismas, descalifica a una poesía como haiku. No puedo encontrar un ejemplo más perfecto que el de un haiku de Yosha Buson:
"ante el crisantemo blanco las tijeras dudan un momento".
Aquí queda desplazada sobre las tijeras un sentimiento del poeta, pero dada la maravillosa maestría técnica de Buson, ni siquiera es percibido como un sentimiento proveniente de persona, de "ego" alguno. Pero es de hacer notar que Serge Tome, luego de un profundo análisis ha comprobado que en la actualidad en el Japón, el uso del pronombre personal Yo en los haiku, es mucho más elevado que en el pasado y mucho mayor que en el de los haiku contemporáneos en Occidente. Tome afirma que hemos creado una imagen de la cultura japonesa (en este caso el haiku) que luego es proyectada sobre la misma y que por ende, no es la verdadera esencia de lo japonés.
VI
Otra razón que limita el uso de la metáfora como el de la analogía, es que, como veremos más adelante, el haiku en su misma esencia es inacabado, dejando a la imaginación del lector establecer nexos entre los elementos de la escena o evento que describe. La metáfora es de algún modo un nexo entre dos elementos y no dejaría espacio para la construcción de un vínculo entre ambos por parte del lector. Si decimos "la luna es una perla", estamos comparando la luna por una parte con una perla por otro. El vínculo entre ambas lo representa algo en común: el blanco. De este modo presentamos al lector una escena totalmente resuelta, sin lugar para que el lector recree un sentido. Esta regla, es justo decirlo, muchas veces no es seguida aún por los grandes maestros del haiku japonés, pues ocasionalmente utilizan la metáfora y la alusión a sí mismos en forma sutil y natural, de tal modo que quedan absorbidos por el poema en sí. En la actualidad, como hemos visto, el haiku se ha diversificado de tal modo, que cada una de las escuelas tiene sus propias características y reglas que distan mucho de la antigua y tradicional, tanto en Occidente como en Japón. Es así que el uso de la metáfora y la analogía es considerado perfectamente válido por muchos, como es el caso de uno de sus pioneros: el poeta japonés Kakio Tomizawa (1902-1962), quien comenzó a utilizar la metáfora, la analogía y la abstracción en sus haiku, influido por la poesía occidental, en particular por los simbolistas. Influenciados por él, los poetas jóvenes iniciaron el movimiento "Shinko Haiku" (nuevo y joven haiku), y a la vez rechazaron el uso del kigo.(4) En cuanto al uso del pronombre personal, es decir, marcar la presencia del poeta en el haiku, o bien de otros en el mismo, si bien la regla general, es eludirlo, tampoco supone una prohibición absoluta. En este sentido, la referencia en primera persona se utiliza, siempre y cuando el poeta esté incluido en el evento que es tema del haiku como parte de él y no como un observador que divide la escena en un adentro y afuera. Muchos haiku considerados paradigmas del género, incluyen al poeta o hacen referencia al segundo y tercer pronombre personal, pero siempre dentro de un esfumado cuidadoso que no centra en el ser humano la escena, sino que lo incluye como una parte de la misma.
VII
El haiku es en su núcleo último una escena y ésta una combinación de imágenes. Como tal se puede volver muy compleja según como se elabore la relación entre las mismas. El tan conocido haiku de Basho:
"Un viejo estanque;
se zambulle una rana,
ruido de agua"
presenta una combinación de dos elementos y un tercero como efecto de la interconexión de ellos en el presente. Se origina asi una nueva gestalt que resulta de la combinación de varias imágenes para dar lugar a un escena única y sintetizadora. La habilidad del haijin para lograrlo, es lo que, unido a su inspiración y profundidad poética, dará lugar a un haiku del más alto logro en cuanto a recortar y expresar un sentido nuevo a hechos aparentemente simples y cotidianos. El haiku de alguna manera es esa cuarta dimensión de la realidad que siempre el ser humano ha buscado en el mundo. Y si el haijin logra plasmarla renueva nuestra conciencia cotidiana que se amplia para dar cabida a otra visión del Universo en el que habitamos. Muchos han insistido en que el verdadero haiku es aquel que produce "satori", es decir el "despertar" de la conciencia búdica. Algo así como un súbito relámpago que ilumina por primera vez aquello que la mente humana ha desatendido, omitido o distorsionado.
Es ésta la tercera publicación del material aportado por Julie para Haiga.
Es parte de un trabajo elaborado por Carlos Fleitas que iremos dando a conocer en su totalidad. Gracias.
Carlos Fleitas es escritor y vive en Uruguay. Escribe haiku en Ingles y en su idioma natal, el Español. Fleitas es Director de la sección en Español, de la organización World Haiku Club, donde es co-moderador del correspondente grupo de discussion y co-editor de la correspondente revista, seccion en Español. Para conocer mejor el escritor, visite su site en: http://www.conectate.com.uy/~carlosfleitas
las siGo con inTerês,
ResponderEliminaruna leCCión perfecTa
graCias
Gracias Myriam.
ResponderEliminarEs muy valioso todo el material, un verdadero ensayo sobre el haiku.
Seguiremos, de a poco ..
Un beso.
Gracias Julie ! como siempre.
Besos.
Cecilia como siempre gracias por tu leccion.
ResponderEliminarLa magía llegó
a su vida,con una mirada.
Hace mucho que no te pasas por mi casa,extraño ti presencia.Besos de luz.
Magnífica documentación, Myriam! Como siempre, me quito el sombrero ante vuestra generosa
ResponderEliminareficacia.
Julie, gracias y felicidades una vez más.
Un abrazo para tod@s!
Hola Julia, también extraño tus dulces palabras. Allá voy ,,
ResponderEliminarGracias, un beso!
Exelente material el que se va sumando: Myriam, Ceci, Julie, Maby... todas.
ResponderEliminarDe esta manera vemos como es de inmenso el árbol contenido en esta semilla que llamamos HAYKU... como de tres genes poeticamente unidos podemos hacer un inmenso árbol de pensamientos y asociaciones y como con una serie de haykus podemos tener un bosque donde todo es mágico
como lo es Haigahaikin
La rana salta
ResponderEliminarlos espejos se rompen
el agua ríe.
Gracias a todos.
ResponderEliminarAntonio, no debemos olvidar los valiosos aportes masculinos como lo es tu caso a través del arte o Dayo con sus conocimientos de poesía, quien está ausente transitoriamente debido a la preparación de un próximo libro.
A tod@s, por la presencia y participación muchas gracias.
Julie, muy especialmente en este caso. Seguiremos publicando el material.
Abrazos.